Vida o muerte en mí yo llevo;
esta ciega criatura que se mueve y empuja
es la dulce paradoja
inevitable
cargándome con alegría
o con pena.
Enséñame, mi chiquito, a aceptarlo tranquilo
ya sea vida o muerte lo que dentro de mí yo llevo.
ya sea vida o muerte lo que dentro de mí yo llevo.
Estoy en manos de Dios, y tú
en manos de Dios
por mí –
todo de Dios es: la luz, la oscuridad,
el invierno,
y este vigoroso mayo,
de pétalos cayendo,
por el sol asombrado
en manos de Dios
por mí –
todo de Dios es: la luz, la oscuridad,
el invierno,
y este vigoroso mayo,
de pétalos cayendo,
por el sol asombrado